Registros Akáshicos y Maestros Ascendidos
Trabajar desde la vibración del Registro Akáshico implica sintonizar con el Amor Incondicional, con la Autorresponsabilidad y con la Unicidad.
Dicha sintonización requiere un entrenamiento, pues la tendencia del Ego es sostener la ilución de la separación desde la victimización.
Es por esta razón que al inicio, se tiende a trabajar, consciente o inconscientemente, desde el Ego, que resulta uno de los primeros desafíos de los Lectores que desean profundizar su vínculo con el Registro Akáshico, para lo cual vamos trabajando con una serie de herramientas, destacando los Decretos Akáshicos (parte del método Akashic Healing ®).
Una vez que integramos la disposición para ir descubriendo gradualmente formas inconscientes de interferencias del Ego, cobran enorme relevancia expresiones como “yo…”, “desde mi…”, etc. Lo que nos permite ir reconociendo esta “faceta nuestra” (Ego) que intenta no perder el control.
La principal herramienta que utiliza el Ego para sostener su posición es generar estados de victimización mediante creencias limitantes y patrones de conducta insanos.
Mientras nos mantenemos en estados de victimización habilitamos al Ego para que interfiera en lo que el Alma busca.
Si el Alma encuentra, el Ego siente que muere (por eso interfiere).
Es de este mecanismo que surgen toda clase de patrones mentales, enfermedades y diversas formas de boicot y auto-boicot.
Una manera sencilla de reconocer estados de victimización es observar cualquier faceta de nuestra vida, cualquier clase de vínculo y buscar si estamos interpretando, ya sea, victimización activa (salvador) o victimización pasiva (víctima).
Las siguientes preguntas puedes ser de utilidad para este fin (no es imprescindible ser Lector de Registros Akáshicos para trabajar este tema)
¿alguna parte de mí se siente víctima de esta situación/persona?
¿alguna parte de mí siente que debería salvar a esta persona?
¿alguna parte de mí siente que alguien debería salvar a esa(s) persona(s)?
¿alguna parte de mí siente que alguien debería salvarme?
¿alguna parte de mí siente que esta persona debería salvarme?
¿alguna parte de mí siente que esta persona está mal o actuó mal?
Cualquiera sea la forma de victimización descubierta, sabemos que el Ego intenta evadir el poder/responsabilidad.
Una de las tantas formas de externalización de poder (victimización), es pedirle información a entidades externas (mis maestros me dijeron, los ángeles dicen, mis guías me mostraron, etc.)
Lo anterior no es parte de una Lectura de Registros Akáshicos, sino una clásica interferencia del Ego, generalmente inconsciente, la que se puede transformar si sostenemos la misma disposición inicial de seguir descubriendo gradualmente formas de interferencias del Ego.
Desde esta estrategia, el Ego pretende que nos desprendamos de dicha disposición, ya sea apuntando al patrón de infalibilidad (me lo dijeron mis Maestros, así es que no hay nada que revisar), lo que por una parte justifica el no observarse, no cambiar (pues ya está perfecto, pues me lo dijeron los Maestros) y por otra parte sostiene un profundo estado de victimización (como creo que no accedo a los Registros, necesito de Maestros “afuera” que me den respuestas), lo que atrinchera la posición de poder del Ego, lo que lo habilita, a su vez, desde ese lugar para nuevas y más robustas interferencias.
Algunas interferencias habituales cuando esto sucede:
“otros tienen que cambiar o están mal, uno no requiere cambios”
“en la zona de confort están otros”
“tal persona tiene interferencias”
“tal persona es mala”
“tal persona es peligrosa”
“tal persona te puede salvar”
“tienes que hacer esto”
“debes hacer esto”
“sólo si haces/hacemos tal cosa estaremos bien”
“no es necesario hacer cambios”
“siempre leías Registros Akáshicos, no es necesario cambiar”
“con la técnica X ya leías Registros Akáshicos perfectamente”
“no necesitas perfeccionarte como Lector de Registros Akáshicos”
etc.
Si el poder está “afuera”, creamos la necesidad ilusoria de dependencia y sostenemos el paradigma de la separación, opuesto al principio básico del trabajo con el Registro Akáshico, a saber, la ”Unicidad”.
Debido a esto es que el procedimiento recibido de los propios Registros requiere tres ciclos durante la apertura (sumado a otras instrucciones que se enseñan en los Cursos).
Durante el primer ciclo se sintoniza con el Amor Incondicional, energía primigenia que sostiene lo que es (amor) y revela espontáneamente lo que no (condicionamientos).
Durante el segundo ciclo se sintoniza con la Autorresponsabilidad, el poder que permite cambiar.
Finalmente, durante el tercer ciclo, se sintoniza con la Unicidad, el axioma central del Registro Akáshico, que amplía consciencia del equilibrio necesario entre unidad (todos somos uno) e individualidad (Ego).
Por esta razón una Lectura de Registros Akáshicos es capaz de acceder a cualquier información que el Alma necesite y que el Ego esté en condiciones de recibir.
Si el Ego no estuviera presente, no se accedería a información alguna.
La mente es parte del equipamiento del Ego, el lenguaje es parte de su estructura, las emociones, las sensaciones físicas, los sentidos, etc.
Una Lectura de Registros Akáshicos va transformando la consciencia, tanto del Lector como del Cliente, en relación a este principio básico de Unicidad.
Dichas sintonizaciones permiten fundirse en el Universo, sin perder la honra por la individualidad en este paradigma, descubriendo la maestría en cada experiencia, pues todo lo que percibimos “afuera” es un reflejo de lo que nuestra Alma está buscando transformar “adentro”.
Es precisamente por la necesidad de sostener el delicado equilibrio de la unicidad, que el amor incondicional permite compasivamente la integración gradual de consciencia unitaria, sin que la individualidad (Ego) pierda el equilibrio. Por esta razón es que durante la formación de Registros Akáshicos se van entregando estructuras que posteriormente se flexibilizan, tales como técnicas para abrir Registros de personas, animales, grupos, ciudades, linajes, conceptos, etc.
La compasión de esta vibración se adapta a nuestros condicionamientos, para que podamos honrarlos, instancia esencial para lograr trascenderlos.
Leer Registros Akáshicos no es lo mismo que Canalizar. No se trata de que una herramienta sea más valiosa que la otra, pues seguramente muchas almas necesitan una u otra experiencia, el punto es que son distintas. La vibración del Registro Akáshico específicamente se avoca a recuperar la consciencia unitaria, develando gradualmente tanto la ilusión de la separación como las formas de victimización que la sostienen.
Un trabajo profundo con el Registro Akáshico nos va poniendo en contacto con todo aquello que creemos, lo que nos brinda la oportunidad de transformarlo cuando sea necesario, recuperando gradualmente la consciencia de nuestra verdadera naturaleza.
¿Por qué entonces se ha generado esta confusión?
Muchas personas hablan de canalizar Registros Akáshicos, o algunos canalizadores, de la noche a la mañana pasaron a decir que leen Registros Akáshicos, o facilitadores desarrollan técnicas para guiar a otros a través de viajes astrales o meditaciones para viajar (afuera) al Registro Akáshico.
Precisamente por el mismo mecanismo descrito. Hay muchas personas que leen un libro o toman un par de talleres de Registros Akáshicos y se quedan en alguno de los patrones mencionados y se convencen de que acceden al Registro Akáshico, por estar canalizando a Saint Germain, Melchizedek, Kwan Yin o Maestros Ascendidos en general o Guías Espirituales o Ángeles, etc.
El mismo mecanismo ha llevado a muchas de estas personas a auto-declararse “maestros” de Registros Akáshicos sin haberse formado adecuadamente, lo que está perfecto para aquellas almas que necesitan transitar dicha experiencia o para quienes necesitan experimentar ser alumnos de quienes eligen no formarse. El punto es que no se trata de la disciplina Registros Akáshicos.
Registros Akáshicos no es una técnica para recibir información.
Registros Akáshicos es una disciplina que permite recuperar consciencia unitaria y trascender proyecciones ilusorias de poder, lo que permite recuperar responsabilidad en la vida, en el aquí y el ahora, develando y trascendiendo formas de victimización, lo que trae como consecuencia secundaria, recibir información.
Un Maestro de Registros Akáshicos no es quien está exento de interferencias del Ego, sino quien se ha entrenado para distinguirlas y ha desarrollado la consciencia de que el Ego está siempre presente.
Lo mismo sucede para un Lector de Registros Akáshicos, mientras más se profundiza, más se honra la presencia del Ego y sus interferencias, pues si el Ego está en reacción significa que sabe que el Alma está muy cerca de concretar el cambio que busca, por lo tanto, lejos de reprocharse por una interferencia, se aprende a valorarlas, pues son una clara señal de que estamos por dar un gran paso.
Mauricio Onetto